¿Quieres ser papá?
Ser padre, al menos en los primeros años, implica cuidar a la diada madre-bebé.
Para el/la bebé al inicio de su vida, su madre es su mundo: su cuerpo, su olor, su respiración, los ruidos de sus tripas, su leche son lo que conoce y lo que le sostiene. Incluso, más allá, podríamos considerar que el/la bebé se vive a sí misme como si fuera una unidad con su madre. Es decir, no sólo es que ella sea su mundo, es que elles son sólo une. El/La bebé necesita de esta cercanía para construir una identidad en relación y que, más adelante, le permita explorar su entorno y establecer otros lazos.
Entonces, ser padre implica cuidar a la madre, al bebé y a uno mismo en esta etapa. Te propongo algunas preguntas para explorar este tema:
¿Qué información tienes o necesitas buscar respecto…
la búsqueda del embarazo?
el embarazo?
el parto y/o la cesárea?
el postparto?
la lactancia y/o la alimentación del bebé?
la crianza?
Considera que, aunque físicamente tu no vayas a vivir el embarazo, es imposible cuidar lo que no entendemos. Conocer a profundidad estos procesos te ayudará a poder apoyar mejor a tu pareja.
2. Toma en cuenta, también, los entrecruces con otras áreas de la vida, porque la paternidad lo revoluciona todo: ¿cómo te imaginas que se puede relacionar (la búsqueda, el embarazo, el parto/la cesárea, el postparto, etc) con dimensiones como:
las finanzas personales y de pareja?
el trabajo remunerado?
el trabajo doméstico y de cuidados?
el tiempo libre?
el autocuidado?
la relación con las familias políticas?
la sexualidad y la relación de pareja?
3. ¿Qué te hace ilusión de la paternidad?
La paternidad necesita ser un deseo enreaizado, no un deseo en las nubes.
¿Cómo te gustaría ser como papá?
¿Cómo transformaría ser papá tus identidades actuales?
¿Cómo te inspira la paternidad de otros hombres? (Piensa en diferentes generaciones pues los tiempos y las necesidades cambian)
¿De qué formas quieres tener un papel más activo que generaciones pasadas en la crianza y el trabajo doméstico?
¿Qué tendrías que soltar o ceder con la paternidad? ¿A qué necesitarías quitarle prioridad?
4. ¿Cómo imaginas que se transformará el vínculo de pareja?
Con la llegada de un hije, la pareja deja de ser solo pareja. Las necesidades y posibilidades cambian.
¿Cuáles suelen ser los retos de las parejas con hijes?
¿Qué les ayuda a mentener una relación feliz?
¿Qué les ayuda a escucharse y a comunicarse con empatía y asertividad?
5. ¿Cuál es tu tribu?
La paternidad frecuentemente te cambia las preguntas cuando ya creías haber encontrado todas las respuestas. Por eso para paternar se necesita una tribu. Para tener tribu hay que ser tribu. Es construir relaciones de apoyo mutuo donde puedas ofrecer y pedir escucha, companía y/o ayuda.
6. La paternidad no es delegable
La paternidad no es delegable. Hay necesidades puntuales ante las que podemos pedir ayuda ya sea en nuestra red de apoyo o como un servicio profesional. Pero hay más que implican hacerse radicalmente cargo.
Cuestiona los discursos, ¿qué le toca a un padre?, ¿qué no le tocaría?, ¿por qué?, ¿quién se supone que asume eso que “no le toca”?
¿Cómo te responsabilizas de la carga mental y práctica de la crianza y los trabajos domésticos?
¿Qué sostiene tu paternidad cuando hay cansancio, dificultades, miedos, incertidumbre, incomodidad…?, ¿qué te reconecta con la esperanza y el disfrute?
En ocasiones, podemos necesitar de un espacio psicoterapéutico para reflexionar más a fondo sobre lo que estas preguntas nos mueven, lejos del ruido de las expectativas y las presiones sociales.